Por: Redacción
26 de Oct, 2025   1:10 pm

Los Houston Texans (3-4) derrotaron con contundencia a los San Francisco 49ers (5-3), que nunca se pudieron encontrar en el partido. Mac Jones tuvo presión la mayor parte del partido y solamente tuvo 107 yardas por aire; mientras que la defensiva de los gambusinos quedó exhausta por los más de 35 minutos que estuvo el equipo texano en el emparrillado del NRG Stadium.

Los Houston Texans comenzaron de manera imponente su ataque, con grandes jugadas para derribar a la ofensiva de Robert Saleh, quien vio desde las laterales el gran trabajo de la línea para defender a C.J. Stroud. Sin embargo, esa primera serie ofensiva de casi 10 minutos terminó solamente con un gol de campo Ka'imi Fairbairn.

El turno llegó para la ofensiva de Kyle Shanahan que se enfrentó contra la defensiva de uno de los pupilos de Saleh, DeMeco Ryans. La presión que impuso la defensa de los Texanos fue suficiente para que los San Francisco 49ers hicieran su primer despeje en el juego, que terminó por marcar la tónica de la primera mitad.

Los Texans continuaron con largas series y un Stroud que logró encontrar en diversas ocasiones a Jaylin Noel, pero fue hasta el segundo cuarto que el dominio texano se hizo más evidente. Los Niners terminaron la primera mitad con tan solo 65 yardas totales contra las 299 de los de Houston, pero el partido continuó abierto gracias a una jugada extraordinaria de los equipos especiales.

Brian Robinson Jr. devolvió una patada de despeje con menos de un minuto en el reloj hasta medio campo; además de que recibió unas yardas adicionales por un castigo contra los Texans. Jones comandó de gran manera y logró mandar grandes pases a Kendrick Bourne y Juaun Jennings, pero el hombre del segundo cuarto fue el ala cerrada George Kittle, quien recibió un balón en las diagonales por parte de Jones y puso los primeros puntos para San Francisco en el partido y lo dejó 7-16 al medio tiempo.

El tercer cuarto comenzó tal y como fue la primera mitad: un gran dominio de la defensa de los Texans, acompañada de un ataque raquítico con un impoluto C.J. Stroud. El mariscal de campo de tercer año se repuso de la intercepción que sufrió en la última jugada de la primera mitad y realizó un drive espectacular; que comenzó dentro de su yarda 10 y terminó con una anotación de Xavier Hutchinson.

Los 49ers, casi moribundos, realizaron un drive que rozó en lo perfecto y que tuvo como protagonista al otro ala cerrada del equipo, Jake Tonges. Mac Jones, como un auténtico gladiador, se fajó para acortar distancias con los Texans y terminó todo con una conversión de dos puntos para dejar el marcador momentáneo 15-23.

Los Texans comenzaron el último cuarto -de nueva cuenta- con una serie larga y que llegó hasta zona roja, sin embargo, una gran penetración de la defensiva de San Francisco los obligó a ir solamente por tres puntos; situación que dejó una ligera vela de esperanza para los Niners.

San Francisco fue incapaz de generar otra jugada de peligro y el tres y fuera volvió a aparecer casi de manera ininterrumpida. Kyle Shanahan observó desde la banda como su equipo se llevó casi 500 yardas totales, mientras que los suyos sólo pudieron sumar 223 con menos de 20 minutos con el ovoide. Los Texans cerraron el partido con una intercepción a Mac Jones y el marcador quedó con un 15-26 para los de Houston.

La derrota de San Francisco llegó de manera oportuna para sus rivales divisionales, que todos descansaron esta semana. En dos semanas, los Niners tendrán un nuevo duelo contra Los Angeles Rams, quienes buscarán arrebatarle la cima del Oeste de la Conferencia Nacional.

Por su parte, los Houston Texans se acercaron a su rival más cercano, los Jacksonville Jaguars, pero aún están lejos de los líderes del Sur y de toda la Conferencia Americana, los Indianapolis Colts.