Por: Redacción
2 de Mar, 2025   2:00 pm

El AC Milan sufrió una dolorosa derrota en San Siro al caer 1-2 ante la Lazio en la jornada 27 de la Serie A.

Un penal en el tiempo añadido, ejecutado por Pedro, inclinó la balanza a favor del equipo capitalino cuando todo indicaba que el partido terminaría en empate. Santiago Giménez, quien fue titular, completó por primera vez los 90 minutos desde su llegada a Italia.

El cuadro visitante arrancó con agresividad, poniendo contra las cuerdas a los locales en los primeros 15 minutos. Boulaye Dia tuvo una de las oportunidades más claras, pero cuando se disponía a rematar frente a Maignan, Yunus Musah lo desarmó con una barrida que generó controversia, pues en la repetición pareció no tocar el balón. A pesar de los reclamos de la Lazio, el árbitro no sancionó la jugada y el Milan se salvó.

Los Rossoneri reaccionaron tímidamente con un intento de Tijjani Reijnders, tras una gran jugada de Rafa Leão, pero la Lazio fue quien encontró el primer gol. Al 27’, Marusic exigió una gran atajada de Maignan, pero el rebote quedó a merced de Zaccagni, quien definió con comodidad para adelantar a los visitantes. El equipo de Sergio Conceição se mostró errático, sin claridad en la construcción de juego, lo que llevó al técnico portugués a hacer un ajuste temprano, sacando a Musah al 36’ para dar entrada a João Félix.

La segunda mitad tuvo un cambio de guion cuando el Milan pareció tomar el control del partido, pero al 66’ sufrió un nuevo golpe: Strahinja Pavlović vio la tarjeta roja por una falta siendo último hombre, dejando a los locales con uno menos. A pesar de la inferioridad numérica, el Milan no bajó los brazos y encontró el empate al 85’, cuando Samuel Chukwueze remató de cabeza un centro preciso para poner el 1-1.

Cuando el empate parecía sellado, la Lazio tuvo la última palabra. En el tiempo de compensación, Maignan cometió una falta dentro del área que el VAR revisó y confirmó como penal. Pedro asumió la responsabilidad y con sangre fría venció al arquero francés para decretar el 1-2 definitivo. Un golpe duro para el Milan, que suma su tercera derrota consecutiva.